En México, apenas el 15 % de los materiales se reincorporan a la economía y solo el 9.6 % de los residuos sólidos urbanos se reciclan, según el Inegi. El país sigue atrapado en un modelo lineal de “usar y tirar” que ya no es sostenible. Sin embargo, un grupo de emprendedores sociales demuestra que es posible transformar residuos en oportunidades a través de la economía circular, un sistema que plantea mantener materiales y productos en uso por más tiempo, rediseñar procesos productivos y generar nuevas oportunidades económicas.
“No es un objetivo en sí mismo, sino un instrumento para lograr sostenibilidad de forma amplia”, sostienen investigadores del CSIC.

México Accelerator Programme (MAP)
Este enfoque está alineado con compromisos globales como el de IKEA, que busca convertirse en una empresa totalmente circular para 2030.
“Queremos que todos nuestros productos estén diseñados para ser reutilizados, reparados, remanufacturados y reciclados, y que estén hechos solo de materiales renovables o reciclables”, explicó Daniela Brito desde IKEA.
Con esta convicción nació el Mexico Accelerator Programme (MAP), una alianza entre IKEA Social Entrepreneurship y New Ventures, que desde 2020 ha acelerado a más de 40 empresas sociales en México. Su misión es clara: escalar emprendimientos que combinan economía circular con impacto social, generando oportunidades en comunidades vulnerables.

Innovar desde los residuos: siete casos de impacto
El programa MAP impulsa hoy a siete empresas sociales que muestran cómo la economía circular puede convertirse en una herramienta de inclusión y sostenibilidad:
- Novabori. Apuesta por la circularidad textil. Recupera residuos de un sector que genera más de 3,700 millones de toneladas de desperdicio al año, de las cuales apenas 1 % se recicla en la Ciudad de México. Los transforma en productos de diseño, reduciendo el impacto ambiental y generando empleos en comunidades locales.
- Rematech. Enfrenta la crisis tecnológica de los residuos electrónicos. En México se generan más de 300,000 toneladas de e-waste al año, y solo un 10% se recicla formalmente (INECC, 2019). La empresa reacondiciona y redistribuye dispositivos electrónicos, promoviendo la inclusión digital para estudiantes y familias de bajos ingresos.
- Cerrando el Ciclo. Trabaja con vidrio, un material 100 % reciclable que en el país no se aprovecha en su máximo potencial (ECOCE, 2022). A través del rediseño de residuos, crea oportunidades de autoempleo para mujeres en situación vulnerable.
- ChopValue México. Introduce un giro urbano y creativo: transforma palitos de sushi desechables –más de 1,500 millones de piezas se tiran cada semana en el mundo (FAO, 2021)– en muebles y productos de diseño, generando empleos dignos en micro fábricas locales.
- SIR Ambiental. Gestiona residuos industriales con un enfoque integral. Recupera y valoriza más del 80 % de los desechos que procesa, mientras emplea formalmente a personas provenientes de la informalidad y contribuye a reducir emisiones de gases de efecto invernadero (SIR Ambiental, 2025).
- Kawara. Reimagina el huarache tradicional al usar telas recicladas y procesos artesanales. Este modelo genera ingresos para más de 100 artesanos rurales, principalmente mujeres y adultos mayores, manteniendo viva una tradición cultural bajo principios circulares.
- Mitz. Transforma residuos industriales como el polipropileno (PP), cuya tasa de reciclaje en México es inferior al 5% (Plastics Technology México, 2022). La empresa los convierte en productos de diseño, al tiempo que genera ingresos para más de 2,200 mujeres en comunidades vulnerables.
Desafíos para México
A pesar de estas innovaciones, los retos son grandes. La infraestructura para la separación y el reciclaje especializado sigue siendo insuficiente y la ciudadanía necesita mayor educación ambiental y herramientas para consumir de manera responsable.
Aun así, los emprendedores acelerados por MAP muestran que la economía circular es más que un concepto: es una vía para generar empleo digno, reducir residuos y fortalecer comunidades.
“Apoyar a un negocio circular es tender puentes y contribuir a un cambio positivo. No importa desde dónde lo hagamos”, afirma Camila Binz, Thought Partner del MAP desde IKEA.
Un futuro circular
Cerrar los círculos materiales podría abrir círculos virtuosos de inclusión, bienestar y sostenibilidad para millones de personas en México. La economía circular, apoyada por iniciativas como el MAP de IKEA y New Ventures, muestra que los residuos pueden ser punto de partida para nuevas cadenas de valor que beneficien al planeta y a las comunidades.
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